Supervisión de las escuelas chárter
La expansión sin control de la industria de las escuelas chárter consume millones de dólares de las escuelas de la comunidad. LAUSD debe proteger las escuelas de la comunidad y regular el crecimiento de la industria chárter y la co-ubicación.
Mi hijo está en transición de kindergarten en Trinity Elementary School. El año pasado, la Gabriella Charter School se ubicó en el campus de nuestra escuela. Ahora dos escuelas comparten el mismo campus y compiten por los mismos estudiantes, salones de clase y recursos.
Gabriella Charter School intentó hacerse cargo de un aula de segundo grado en nuestra escuela pública y tuvimos que luchar para mantenerla. Ellos usan el personal de limpieza empleado por Trinity, pero los custodios no reciben un pago adicional, o incluso suministros adicionales que necesitan para dar servicio a los estudiantes y aulas adicionales. Gabriella Charter School también trata a nuestros estudiantes con necesidades especiales con una descarada falta de respeto; se negaron a insular contra el ruido su estudio de danza que está justo al lado de una clase de educación especial llena de estudiantes que son sensibles al ruido. Las ubicaciones conjuntas escolares han dividido a nuestra comunidad y han causado mucha tensión entre nuestros hijos y padres de familia.
Alejandra Delgadillo, madre, Trinity Elementary School
Sólo los hechos
La intención original de las escuelas chárter era genera estrategias innovadoras para mejorar el aprendizaje de los estudiantes. Apoyamos a las escuelas chárter que están comprometidas con esa labor. Pero en Los Ángeles, la industria chárter, dominada por las corporaciones, se ha centrado más en debilitar significativamente a nuestras escuelas públicas y en promover una agenda de privatización y eliminación de sindicatos.
Los Ángeles es el hogar de la mayor concentración de escuelas autónomas del país. Desde 2008, la industria de las escuelas chárter ha crecido a un increíble 287 por ciento y ahora tiene un total de 224 escuelas chárter independientes en el LAUSD.1La industria chárter le cuesta al Distrito casi $600 millones de dólares cada año.2
A diferencia de nuestras escuelas comunitarias, las escuelas chárter no atienden a todos los estudiantes. La industria ha sido cuestionada por fomentar el acceso discriminatorio que afecta a estudiantes de color, estudiantes de bajos ingresos, estudiantes del idioma inglés y estudiantes con discapacidades. Algunos representantes de las escuelas chárter aconsejan “que no se queden o que no se inscriban” a los estudiantes que no quieren darles cabida. Entre esos estudiantes se encuentran los estudiantes con bajos antecedentes académicos o necesidades especiales.3Las escuelas chárter operadas por corporaciones funcionan con asambleas corporativas designadas de forma privada que no representan al público, sin embargo, toman decisiones sobre cómo se gastan los fondos públicos. A menudo no informan sobre las finanzas de manera transparente y se han visto afectadas por constantes controversias relacionadas a conflictos de intereses.4
La industria chárter también continúa expandiéndose a través de las «ubicaciones conjuntas», donde una escuela chárter y una escuela comunitaria se administran por separado pero coexisten dentro del mismo campus. Las escuelas autónomas de ubicación conjunta se apoderan de los laboratorios informáticos de las escuelas públicas, los centros de padres de familia, las oficinas de enfermeras y consejeros. También crean tensión y competencia entre los administradores escolares, maestros y padres.
LAUSD debe de proteger las escuelas comunitarias regulando la creciente industria de las escuelas chárter y las ubicaciones conjuntas en los campus de las escuelas comunitarias.
LAUSD debe requerir a las escuelas chárter de proveer información anual de la demografía estudiantil, inscripciones, destituciones y expulsiones. También se deben establecer medidas de seguridad para garantizar que las ubicaciones compartidas no disminuyan las condiciones de aprendizaje y trabajo en nuestras escuelas comunitarias. En todos los sitios de ubicación conjunta, los padres de familia y los educadores deben tener su lugar en la mesa para asegurarse de que la ubicación conjunta no tenga un impacto adverso en la escuela comunitaria del distrito, sus programas o su capacidad para ampliar esos programas.
1 Los Angeles Unified School District (LAUSD), About Charter Schools. Retrieve from: https://achieve.lausd.net/Page/1816
2 Zoller, S., “Review: Fiscal Impact of Charter Schools on LAUSD.” MGT America Consulting, LLC. May 2016. p. 37
3 Miron, G., “Charters Should Be Expected to Serve All Kinds of Students” Education Next. Fall 2014 / Vol. 14, No. 4
4 Dingerson, L., Gutierrez, E., & Regullano, G., “WHOSE SCHOOLS? Community Representation and Transparencyin Charter School Governance in Los Angeles.” United Teachers Los Angeles (UTLA). Jun. 2018. p.4